jueves, 17 de julio de 2014

Aprueban proyecto sobre niveles de arsénico en la Provincia

El Senado bonaerense aprobó una iniciativa para que la provincia de Buenos Aires adopte los parámetros establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en cuanto al límite de arsénico permitido en agua potable, siendo el mismo de 0,01 mg/l.
“Es imprescindible aplicar como límite de arsénico en agua potable el valor de 0,01 mg/l, ya que puede estar en riesgo la salud de muchos bonaerenses”, afirmó el senador provincial Omar Foglia, autor del proyecto, que debe ser aprobado por la Cámara de Diputados para convertirse en ley.
Y agregó: “Siendo la salud un derecho humano esencial, es que entendemos que el Estado provincial debe realizar los esfuerzos necesarios para garantizar su efectivo goce. No se puede condenar a la población a seguir consumiendo agua tóxica y que a largo plazo resulte afectando seriamente la salud”.
La iniciativa establece que las empresas concesionarias de agua en la Provincia tendrán un plazo de 24 meses, no prorrogables, para readecuar la prestación del servicio a los parámetros establecidos en el proyecto y que en los lugares donde las mediciones de nivel de arsénico en agua supere los niveles que se establecen, el Estado provincial deberá financiar el establecimiento de plantas de tratamiento de remoción de arsénico y fluoruros.
La OMS, en la Guía de Calidad para el Agua Potable del año 1993, redujo el valor guía de arsénico en agua de 0,05 mg/l a un valor de 0,01 mg/l, basándose en un estudio realizado en 1986 sobre evaluación de riesgo por el Foro de Evaluación de Riesgo de la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (USEPA).
En ese estudio, la USEPA estimó a partir de un importante estudio epidemiológico realizado en Taiwán que el riesgo de contraer cáncer de piel aumenta ostensiblemente como consecuencia de la exposición a agua contaminada con arsénico.
En base a este antecedente la Organización Mundial de la Salud decidió en 1993 reducir el límite de arsénico de 0,05 a 0,01 miligramos por litro de agua.
En Argentina el problema se empezó a conocer hace más de 50 años, cuando epidemiólogos de Córdoba y otras provincias asociaron daños a la piel con la presencia del arsénico en el agua de bebida.
Como consecuencia de los altos índices de arsénico encontrados en el servicio de agua del noroeste de la Provincia de Buenos Aires, a fines del 2008 la Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo de San Nicolás obligó a la empresa concesionaria Aguas Bonaerenses S.A. a suministrar en forma gratuita agua potable en bidones a toda persona o entidad que lo solicite, ya que debido a una serie de estudios se comprobó que el agua que brinda la compañía no es apta para el consumo humano: al presentar una concentración excesiva de residuos fijos, cloruros, sulfatos y nitratos.
En los últimos tiempos, se ha observado preocupación entre los vecinos de diversos Partidos de la Provincia de Buenos Aires en cuanto a la presencia de valores elevados de arsénico en el agua de la red, esto se ha dado puntualmente en los Partidos de Dolores, Chascomús, General Alvarado, General Pueyrredon, Las Flores, Maipú, Mar Chiquita, Rauch, Villa Gesell, 9 de Julio, Rojas, Salto, Tres Arroyos, Adolfo Alsina, Alberti, Bragado, Coronel Dorrego, Florentino Ameghino, General Arenales, General Villegas, Carlos Casares, Junín, Leandro N. Alem, Baradero, Tornquist, Suipacha, Navarro, Mercedes, San Vicente, Brandsen, Tapalqué, Daireaux, General Lamadrid, Rivadavia, Pellegrini, Puán, Saavedra, Médanos y Carmen de Patagones.
Fuente: El Parlamentario.com